Cuando el niño hace rabietas, nos está diciendo que algo le molesta, quiere comunicarse y por su corta edad no puede hacerlo, se siente incómodo, quiere que le pongan atención, son reacciones comunes porque quiere ser autónomo e independiente y no puede expresar sus deseos adecuadamente.
Es así como está manifestación la hace a travésla respiración hasta poner su carita roja), gritos, puntapiés, revolcones en el suelo, manifestaciones que desubica y desequilibra a los padres y así obtiene lo que desea. Los padres no pueden dejarse enganchar haciendo pataleta con el niño, es un error común porque casi siempre se actúa con agresividad bien sea verbal, o física en el peor de los casos. Se reacciona con gritos, palabras ofensivas al niño, y así la pataleta del niño se empeora, porque está recibiendo agresión del adulto y el necesita en ese momento comprensión. No es correcto ignorar al niño en el momento de la pataleta, se debe calmar, decirle respira profundamente, tranquilízate y me indicas que quieres, el padre se debe retirar por segundos del sitio de la pataleta, y pensar cómo se debe actuar, buscar una estrategia e influenciarlo con calma para que cese el berrinche.
Es importante que los padres se ubiquen en la edad del niño, estas manifestaciones de inconformismo se presentan desde bebes de 6 meses de edad, hasta los 5 años aproximadamente, este rango de edad depende del manejo que se dé, si tempranamente se manejan y se controlan, se disminuyen rápidamente; más avanzada la edad del niño más difícil de extinguir las rabietas. Independientemente de la edad, del manejo de la primera rabieta, dependerá la continuidad o no de éstas.
Las normas y hábitos de casa, deben ser claras. Mantener claridad en los hábitos de higiene, alimentación y sueño, se ha comprobado que sí no se es flexible en éstos, se forma una personalidad de aceptación y no irritabilidad frente a la no consecución de los caprichos. Los hábitos se forman desde la cuna, los niños saben perfectamente cuando manipulan a los adultos.
No siempre satisfacerlo en todo lo que quiera, se le debe enseñar que las cosas se obtienen a su debido tiempo, es necesario que aprenda desde temprana edad que no todo lo que desee se le satisface inmediatamente. SIEMPRE PIENSE EN SU HIJO Y NO EN LOS DEMAS, cuando se encuentren en sitio público o reunión social, su hijo es prioridad de atención y debe ayudarlo a que se tranquilice, el adulto no merece su atención. Es importante enseñarle al niño a manejar las dificultades y a elevar el nivel de tolerancia. Al finalizar la pataleta, dígale que LO QUIERE MUCHO y que lo que hizo está mal hecho y que no es la manera de solicitar las cosas.